La madera, entre la roca

Tenaz, la madera avanza cálida, encontrando su camino entre la fría roca.  Elástica, para seguir siendo ella misma, a pesar del duro suelo que la duerme. Amable, sabe a veces modificar su camino por no perder el rumbo. Natural, se llena de vida a cada nudo, aunque alguna rama se caiga en el camino. Sencilla, por sus infinitos matices para los seis sentidos. Silenciosa y con tantas cosas sentidas…

Así es la madera; así vive y avanza entre la roca, pasando por debajo, a veces por encima, apartándose grácilmente o saltando y moviendo sus caderas. Así es ella, a pesar de las piedras.

Foto: Domingo 18 Dic, 09h, Carretera de las Aigües, Bcn