
19 May Yoga tiene que ver con «tener los pies en el suelo»
El yoga no va de las asanas, va de la presencia; no trata de la forma de tu cuerpo, sino de la forma de tu vida; el yoga no se realiza, se vive; a tu práctica de yoga no le importa quién eres, le importa la persona en la que te estas convirtiendo; el yoga no se mira en el espejo, se mira n el alma.
Facebook me recuerda con una foto que hace 4 años inicié mi práctica de yoga, con mi queridísima -y desde entonces «hermana de vida»-, Laura. una mujer generosa, bella, conectada con la tierra, con el cielo y con lo sutil, que me enseñó a conectar con mi cuerpo en una sala a 40 grados. Y cuatro años después, más allá de disfrutar de la práctica diaria, el yoga se ha convertido para mí en una forma de empezar el día, con los saludos al sol. Una forma de observar mi cuerpo, mis emociones, mis pensamientos, mi respiración y mi presencia.
Beneficios físicos
El yoga ayuda a mejorar la flexibilidad, dar fortaleza y equilibrio. A través de las posturas y el estiramiento, las torsiones y los equilibrios, el yoga ayuda a tonificar los músculos, aumentar la resistencia y mejorar la salud en general. Además, las asanas y la respiración consciente pueden ser de gran alivio para dolores y tensiones que percibimos en nuestro cuerpo físico.
Bienestar emocional
La práctica de yoga puede ser una forma muy poderosa para mantenerse centrado en momentos o épocas de estrés, los momentos de ansiedad proyectada al futuro que nos arranca del momento presente. A medida que practicas yoga, tienes una relación más consciente con tu cuerpo, tus pensamientos y tus emociones. Combinando las asanas con la respiración profunda y actitud meditativa, son de gran ayuda para calmar la mente, reducir el estrés y mejorar tu estado de ánimo. El yoga promueve la presencia y el centramiento.
Conexión energética
El yoga tiene una dimensión profunda o espiritual, que puede ayudar a conectar contigo misma y con la vida que somos, no la vida que vivimos. A través de la práctica del yoga, puedes experimentar una sensación de conexión con tu ser interior y con el mundo que te rodea. Puede ser una forma de cultivar la gratitud, la compasión y la aceptación hacia ti mismo y los demás. El yoga también puede ayudarte a explorar y expandir tu conciencia, desarrollando una mayor conexión con tu espiritualidad o tu propósito.
Presencia y enraizamiento
El yoga te mantiene con los pies en el suelo, incluso en las invertidas o asanas que tenemos el corazón más alto que la cabeza. El yoga fomenta la conciencia plena y la presencia en el momento presente. A través de la atención plena en la respiración y en las sensaciones corporales durante la práctica, aprendes a estar más presente en cada aspecto de tu vida. Esto te permite enfrentar los desafíos con mayor claridad y calma, y disfrutar plenamente de las experiencias de cada momento.
Las que me conocéis, sabéis que empiezo el día con una meditación con AJ Larruy, antes de iniciar mi jornada laboral. Y junto con el yoga se ha convertido en una forma de ver la vida. Y eso no significa que practico constantemente, en cualquier lugar -que a veces sí- , ni que sea una crack del yoga, ni mucho menos que sea una vocación. Simplemente puedo decir que el Yoga es una forma de afrontar las cosas de la vida y a mi me sirve, me sienta bien en todos los cuerpos, físico, emocional, mental, energético…
Gracias por pasarte por aquí… Namaste!